Cuando el ser que tú amas,  deje en ti sabor  amargo, no lo debes aceptar no permitas un mal rato. Promesas desvanecidas, pasiones que se han truncado, sentimientos que han jugado con una falsa mentira. Tú lo sientes, es muy triste Un engaño entre los dos… Cual cristales que se quiebran, en un solo corazón. Por una senda solía, pasear bajo luna nueva. Mas hoy ella sola lleva el recuerdo de ése amor No engañes al ser que amas, pues es ingrato el dolor. Sorpresas la vida lleva… Y mañana saldrá el sol… El que ayudará a calmar cicatrizando tu herida... con optimismo que anida A quien jamás te mintió Ana María Zacagnino Derechos Registrados (En la voz de la Autora)



               





imagen facilitada por Ana María Zacagnino
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