Cada cuenta de un rosario, es un día que culmina. Cada verso que se apaga, es una estrella perdida. ¡Gracias Dios, por permitir que mi vida sea tan bella! Tú sabes que la poesía bulle toda por mis venas. Y en la Patria de mi abuela, recibí con emoción, una alegría muy grande que guardo en el corazón. Pues allí, con mis colegas escritores y demás, recibí honores y premios... que jamás he de olvidar. ¡Bendita locura mía! bendita sea de verdad esta hermosa poesía... ¡que nunca en mí morirá! Ana María Zacagnino (Declamado por la Autora) Dedicado a "Recital de Poesía" A Coruña, a 11 de Mayo de 2007 :-:-:-:

Con mi gratitud a "Antología de Aires Gallegos" en cuyo acto fuí galardonada con:

"La pluma al escritor", "Medalla" y "Diploma".


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