Si en mi vida no existiera Poesía, tampoco existiría Fe en Dios. Amo tanto a los seres todavía, amo tanto la vida que Él nos dio. Que quisiera compartirte mi alegría, o tal vez, mi melancolía interior. Ana María Zacagnino


Ríete ya, amigo mío, ríe si ése es tu deseo. Llena tu alma de gorjeos incesantes como el río. Que al tropezar con las rocas, forma lirios, forma rosas... y se vuelca en el vacío. Ana María Zacagnino


Hoy creo que también creía en vano. Cuando de ti creí lo que creía. Vale más, no juzgar al ser humano. sin antes apreciarlo todavía. Ana María Zacagnino :-:-:-:-:-:-:-:-:-:-: No se permite el uso ni la copia del material escrito, gráfico y auditivo sin previa autorización de la autora